Empezar el viaje por dar el primer paso

Hoy tuve la suerte de disfrutar de un masaje y de un circuito de baños en un Hammam. Una maravilla, un regalazo. En cuanto acabó hablé con el masajista, le pregunté por las proporciones entre intuición y técnica en sus masajes. Me confesó que cada masaje era totalmente diferente y que dependía muchísimo de la persona que lo recibía. Creo que la mayoría de profesionales del mundo de la terapia sudarían para responder esto, la intuición es poco compatible con la ciencia, pero ese es otro tema.

También le pregunté si durante el trabajo corporal percibía detalles más profundos de cada persona, si tal vez podía vislumbrar algún elemento revelador que pudiera serle útil al masajeado. En su caso, prefería reservarse las informaciones que afirmaba leer en sus clientes, aunque conozco a un magnífico terapeuta que aprovecha el trabajo corporal del masaje para ver cuáles serán los primeros pasos terapéuticos. Este también es otro tema.

Entonces pregunté qué me recomendaba para empezar en el mundo de los masajes. Un libro, una web... Su respuesta fue concisa y directa. "Un masaje". Da un masaje. 

Me encantó. Basta de rodeos. ¿Cuántos nos hemos pasado una eternidad preparando cualquier "viaje" antes de dar el primer paso? ¿Te interesa la fotografía? Haz una foto. ¿Tienes un sueño? Da el primer paso. Hay bastantes cosas para las que no hace falta un título, como dar un beso...

Yo ya encontré una persona que pronto recibirá un masaje. ¡Gracias!